ELISABETE ISABEL
Oporto, noche
Acrílico sobre lienzo
Elisabete Guerreiro contribuye a esta muestra con una obra en la que representa una visión nocturna de la Torre de los Clérigos de Oporto. Esta alta torre, de 75 metros de altura, considerada una de las más elegantes de Europa, ha sido seleccionada por la autora como motivo de su participación en esta exposición por dos razones. De una parte, porque siendo unos de los monumentos más emblemáticos de la ciudad de Oporto, ha pretendido con ello homenajear a la ciudad del pintor Joaquim Lopes, autor de los paneles que decoró la Sala de Comercio del Pabellón Nacional de Portugal en la Exposición Iberoamericana. De otra, como reconocimiento y recuerdo a los navegantes portugueses cuyas gestas fueron exaltadas en el certamen, porque al ser vista a 65 km del mar, esta servía de guía a los navegantes.
La autora ha representado una escena nocturna, recurriendo a la iluminación artificial como pretexto para utilizar tonalidades vibrantes y fuertes, las habituales en sus obras y para así contrastar y fusionar los amarillos, los tonos oscuros y los reflejos en el piso. El cromatismo de su pintura, unido a las formas geométricas y minimalistas de la arquitectura urbana ha dado lugar a una pintura onírica y sugerente.